Un ensayo con inmunoterapia logra curar el cáncer de recto a 12 pacientes sin necesidad de quimio ni cirugía
- El tratamiento ayuda a las células inmunitarias a identificar a las cancerosas para eliminarlas
- Los investigadores piden prudencia, más estudios y prolongar el seguimiento de estos pacientes
Doce pacientes han visto remitir por completo el cáncer de recto en un ensayo clínico con inmunoterapia llevado a cabo en Estados Unidos y publicado esta semana en The New England Journal of Medicine. En algunos casos, los resultados se extienden durante más de dos años, sin cirugía ni quimioterapia.
El pequeño estudio de fase 2 del Memorial Sloan Kettering Cancer Center (MSK) se circunscribe a tumores en el recto localmente avanzados -pero no extendidos a otros tejidos- y con una mutación genética específica, llamada «deficiencia en la reparación de los errores de emparejamiento» o «inestabilidad de microsatélites» (MMR y MSI, por sus siglas en inglés).
La inmunoterapia aprovecha mecanismos de nuestro sistema inmunitario para acabar con el cáncer y, en esta ocasión, los investigadores administraron dostarlimab, un anticuerpo monoclonal anti–PD-1, para ayudar a las células inmunitarias a identificar a las cancerosas y eliminarlas.
El tratamiento ya se utilizaba para controlar tumores colorrectales con metástasis, pero, si se confirma el hallazgo, también podría servir para evitar llegar a esa situación grave. Mientras tanto, los investigadores piden prudencia y un seguimiento prolongado para evaluar la duración de la respuesta y los efectos a largo plazo.
Un estudio muy pequeño, pero sin casos de recaída
De todos los pacientes que han participado en el estudio experimental, al menos 12 han superado, como mínimo, seis meses de seguimiento sin evidencia del tumor en las pruebas, de acuerdo con el artículo científico publicado. Pero la nota de prensa del centro MSK cita «14 personas, y sumando» y el diario New York Times confirma 18.
«En el momento de redactar este informe, ningún paciente ha recibido quimiorradioterapia ni se ha sometido a cirugía, y no se ha notificado ningún caso de progresión o recaída durante el seguimiento», que se ha extendido hasta los dos años en algunos casos, según el artículo firmado por las oncólogas Andrea Cercek y Melissa Lumish, entre otros.
La inmunoterapia permite liberar a las células inmunitarias, que están bloqueadas por las cancerosas para evitar ser identificadas. «Cuando se quitan los frenos a las células inmunitarias, las células MMRd tienen un aspecto especialmente extraño porque tienen muchas mutaciones. Así, las células inmunitarias atacan con mucha más fuerza«, ha ilustado Cercek en la nota del centro Memorial Sloan Kettering. «La inmunoterapia redujo los tumores mucho más rápido de lo que esperaba».
Menos efectos adversos, aunque hay que seguir investigando
Además, tampoco se han notificado acontecimientos adversos importantes (grado 3 o superior), lo que contrasta con las secuelas de la terapia convencional.
«Nuestro primer deber es salvar la vida del paciente. Pero el tratamiento estándar del cáncer de recto con cirugía, radiación y quimioterapia puede ser especialmente duro para las personas debido a la localización del tumor», ha agregado la oncóloga. «Pueden sufrir disfunciones intestinales y vesicales que alteran la vida, incontinencia, infertilidad, disfunciones sexuales y mucho más», situaciones con mucho impacto en su calidad de vida y su salud mental.
Pero en un editorial publicado en paralelo en The New England Journal of Medicine, la oncóloga Hanna K. Sanoff advierte: «estos resultados son motivo de gran optimismo, pero este enfoque todavía no puede sustituir a nuestro actual enfoque de tratamiento curativo».
La especialista alega la falta de datos sobre su efectividad a largo plazo y se pregunta si realmente la desaparición del cáncer durante unos años equivale a la curación. «El cáncer vuelve a crecer de un 20 a 30% de los pacientes cuando el cáncer se maneja de forma no quirúrgica», señala. Es necesario seguir observando a estos pacientes y, por supuesto, investigando vías alternativas.